Translate

sábado, 27 de abril de 2013

Callejeando por mi Ciudad Torrelavega Cantabria España




CALLEJEANDO POR MI CIUDAD
                                   
                                                           TORRELAVEGA









Salgo a recorrer mi ciudad, los pasos me llevan hacía la llamada ruta del colesterol, cada trozo de esa inmensa avenida está dedicada a escritores, pintores, escultores, y demás personas ilustres de la comunidad,

            Comenzaré por Antonio Bartolomé, a quien tuve el honor de conocer y de escuchar de su boca un sin fin de anécdotas y curiosidades.
            Nació en Rocín en mil novecientos siete, y después de pasar por aulas y trabajos varios, terminó siendo inspector de la cooperativa la SAM.
            Por su trabajo contactó con todo tipo de gente tanto de pueblos como de aldeas, que le fueron narrando historias, dichos populares de cada zona, apodos, y un sin fin de anécdotas, que él dejo plasmado magistralmente en dos de sus libros, Anecdotario Montañés, Relatos Trovas y Anécdotas.
            Así mismo en varios de sus trayectos se encuentran los pintores Balbino Pascual gran artista especializando sus obras magistralmente en zona de Potes sobre todo plasmando la inmensidad de los picos en sus distintas épocas.
            Sobrado, artista de líneas sobre puestas y conjugando el negro sobre blanco, rojos y grises con maestría dando profundidad a su obra.
            Pondal Supo extraer del académico Eduardo Chicharro, el luminoso colorido y valores figurativos creando un estilo propio. Así mismo también tiene un trozo de vía Rufino Peón forjador de escultura en hierro, su taller estuvo ubicado en la no menos conocida calle Carrera.
           
Siguiendo por otras rutas me encuentro con la plaza de Nueva Ciudad, dedicada a Mauro Mueriedas, gran escultor de la madera y mejor persona, integro, sincero, su obra está impregnada de vivencias de Torrelavega, de la mina donde trabajó, del campo y el mar, así como su experiencia como padre, que dejo plasmada en un bonita maternidad y que a pesar de las vicisitudes que pasó, jamás guardo rencor a nada ni a nadie. Tuve. el gusto de conocerle y compartir con él grandes veladas en la escuela de Artes, haciéndonos un pequeño recorrido por su vida, y la de Tinuca, su amada compañera que según nos dijo: La quería tanto que no la había traicionado ni tan si quiera con el pensamiento.
            En mi recorrido sin salir de Nueva Ciudad llego a la Iglesia de San Pablo, Las proyectaron los Arquitectos Antonio Ortega que falleció en un accidente de aviación y no la pudo ver concluida, y Luís Pedraza Derqui, inaugurándose en 1985.
            Voy caminando, llego a Campuzano, y contemplo La iglesia de San Miguel de estructura un tanto rara, pero que me entero de que es así porque el solar era una especie de geometría triangular. El joven arquitecto Torrelaveguense Ricardo Lorenzo fue el encargado de acabar el proyecto, después de buscar una solución desarrolló el programa dentro de los límites reducido y complicado del solar triangular. Conformando un edificio-organismo de espacios fluidos en una sutil relación exterior-interior. Sigo caminando y en mi recorrido me encuentro: salpicando plazas y edificios emblemáticos, con historias que contar.
           
            . Daría para escribir un libro, pero por hoy mi ruta la voy acabar en el colegio de la Paz. Se encargó el proyecto a Fray Coello de Portugal. En la fachada principal de la iglesia se contempla la colocación de una imagen escultórica. En su extremo oeste, fue Subirachs quien diseño el muro definitivo, trabajó los encofrados del hormigón dejando el paño compuesto con impresiones y resaltando la palabra Paz en distintos idiomas.
                                               A.R.G.